Allá vamos

Y mientras escuchaba un tema de Queen (Don´t stop me now), reconocía el verdadero valor de la dinámica de la vida misma. Loco no?

Momentos de gloria, momentos de caída profunda. Éxitos, fracasos?. Alegrías, tristezas. Blanco, negro. Subidas, bajadas. Compañía, soledad. Lleno, vacío?. Ruido, Silencio. Abundancia, escases. Paciencia, Intolerancia. Trabajo, ocio. Ganar, perder. Y en el medio de cada extremo nosotros atravesándolos.

Ninguno de ellos es bueno o malo en si mismo, depende de cómo son vividos y lo que sacamos en limpio de cada uno y la manera que tenemos de relacionarnos.

Podemos llorar, estar tristes, solos, pero eligiendo que ese no sea nuestro estado eterno, eligiendo el transito que nos hace aun mas fuertes y mas grandes. Sabiendo que muchas veces retroceder no es más que tomar carrera para pegar el salto. Recordando que no somos invencibles pero eso no significa la derrota asegurada, que como dice el dicho no está muerto quien pelea.

Y puede pasarnos todo en un instante, y puede ser un día gris, pero elegir seguir viendo el sol. Porque las nubes solo nos demuestran lo finito de la vida y que después de cada tormenta, la luz y el calor del sol se abren paso.