21/2/08

Me confieso...

Tengo 32 años y toda mi vida fui una infantil, caprichosa y testaruda.

En el último año, he trabajado para vivir mi vida desde el lugar de mujer plantada, que sabe lo que quiere y va tras ello, porque eso es lo que soy.
En el camino he tenido tropiezos, sería una negadora si no lo asumiera y aunque esos tropiezos me han permitido ponerme de pie con mayor seguridad, porque viví precisamente eso que no quería para mí, me han dolido y dejado marcas.
Hoy digo, no quiero más tropiezos.
Quiero andar este camino sin trastabillar otra vez, sin salirme de él, si correrme un sólo centímetro.

Puedo hacerlo, Quiero hacerlo, Decido hacerlo. Dejo de lado mis actitudes infantiles y doy lugar a aquellas que se relacionan más conmigo y la mujer que quiero ser.

De nada me ha servido mi actitud caprichosa, de nada me ha servido no ponerme límites a mí misma, lo único que he generado, es distancia, vacío y tristeza… y una enorme.

Quisiera pedir ayuda para detectar cuando no estoy siendo quien quiero ser, pero es algo que me corresponde sólo a mí… y estoy decidida a lograrlo...

2 comentarios:

Zeb dijo...

Date tiempo...

O crees q 32 años se cambian de un día para el otro?

No es pesimismo lo q quiero transmitirte...

Sino optimismo para que sepas que lo podés hacer...de hecho, si sos testaruda y se te metió esa idea en la cabeza...lo vas a lograr...

Pero paciencia, date tiempo...

Barbie dijo...

Gracias Zeb!! Estoy en eso... el darme tiempo es lo que más me cuesta, pero nada que con voluntad no se modifique...